El subsecretario de Tránsito de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, Enrique Romero, salió al cruce del gobierno y en respaldo del intendente, Germán Alfaro (PJS), luego de las duras críticas del oficialismo contra el aliado a Juntos por el Cambio (JxC).
"Cada vez que Alfaro, habla parece que patea un hormiguero y el oficialismo sale disparando sin rumbo", señaló Romero, a través de un comunicado.
El funcionario municipal consideró "menester que (el jefe de Gabinete Juan) Manzur gestione ante los 'laboratorios amisocios' la provisión de psicotrópicos con acción depresora del sistema nervioso central, para disminuir o eliminar tanta ansiedad y desesperación política".
"Tiene que ser un ansiolítico ideal que alivie o suprima los síntomas de la ansiedad, calmando la hiperexcitabilidad nerviosa y disminuya la idiotez e inutilidad política del oficialismo", ironizó.
Romero indicó que, "en realidad, (en el Frente de Todos) deberían estar al borde de la locura por un gobierno de que se ha convertido en la continuidad genética de quienes mataron a Rucci y al padre Carlos Múgica en los 70; los mismos que siendo diputados nacionales durante el Gobierno del general Perón renunciaron a sus cargos para pasar a la clandestinidad y fueron cómplices inconscientes del golpe de estado del 76; los mismos que hoy prometen sangre y saqueos".
"Deberían estar nerviosos por la inflación del 70%, por el narcotráfico y los casi 5.000 suicidios de jóvenes menores de 17 años desde el 2003, por consumo de paco. Deberían preocuparse por los 700.000 pobres generados por la falta de radicación de industrias, diversificación de la producción e incorporación del valor agregado a la economía", enumeró.
Además, Romero expresó que "el 50% de la población carece de agua potable y/o cloacas", y "desde que asumió (Osvaldo) Jaldo hicieron anuncios por cientos de miles de millones de pesos, que pueden estar superando al presupuesto nacional, y desde hace 18 años no han hecho una sola obra para el desarrollo integral de Tucumán".
"Si siguen así, van a padecer palpitaciones, calambres, manifestaciones gastrointestinales, cardíacas o genitourinarias y problemas de la esfera sexual. Dejen de echarle agua a la leche y de vender tanto humo", finalizó el funcionario municipal.
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